lunes, 4 de agosto de 2008

Su dulce historia

Sentía su piel, sus labios, su silueta se dibujaba tras su pantalón, podía observar como su polla iba creciendo bajo su ropa, como estaba cada vez más dura, como su excitación era cada vez mayor, tanto como la mia, sentía deseos de lamérsela, quería que mi lengua resbalase por su polla, me enseñó la punta, solo la punta, a la cual seguía la polla que quería lamer, la que quería saborear, sentía deseos de tenerla en mi boca, de resbalar mi lengua por ella, de subir y bajar por ella sin parar, quería sentir su sabor, como de rugosa era su piel, me excitaba, me gustaba, todo quedó pendiente, todo en el aire...

Él se fue, yo me fui, pero quedó pendiente una historia, un relato en el cuál él me contará su... lavado de manos, como él quiso llamarlo, como él se lo haría saber a ella y yo le contaría mi... experiencia.

Después de hacer varias cosas, su recuerdo volvió a mi, debía cumplir mi parte, debía homenajearlo, me debía a él por unos minutos, por un momento y así lo hice. Recordé nuestro encuentro, nuestras palabras, todo, su imagen, su dedo recorriendo sus labios en un claro intento de seducirme, su pose insinuante, su silueta, su polla asomado del pantalón, pantalón que le hubiese arrancado de estar con él.

Mientras todo eso volvía mi mente, mientras el recuerdo me comenzaba a calentar, me tumbé en el salón, cerrando la puerta, como en esa historia que me contó. Me dispuse a sentirlo sobre mi, a disfrutarlo en mi recuerdo, mis manos que ahora eran las suyas dibujaban sobre mi piel el deseo, esas manos acariciaban sutilmente mi contorno, erizaban mi piel a su paso, mis labios, mi cuello, mis pechos desnudos, no podía contenerme.

A la vez que sus manos me tocaban, me poseían, mi coño daba señales de que estaba listo, de que quería acción, mis piernas se entrecerraban imaginándolo entre ellas, sus manos seguían el camino, seguían bajando, disfrutándome y se acercaban a mi pelvis, mmm cada vez deseaba más que esas manos lo rozaran, lo tocarán, comenzaron a acariciar mi clítoris ya húmedo, ya excitado, ufffff mi cuerpo respondía mucho mejor de lo que esperaba, estaba ansioso, deseando de sentirlo, sus dedos subían y bajaban por mi clítoris, dibujando mi deseo, deseo que me mojaba, que lo mojaba.

Llevó sus dedos hacía mi boca, me los hizo lamer, su sabor era mi sabor, mi deseo, el deseo que hacía que no pudiera dejar de moverme, dejar de sentirlo sobre mi, poseyéndome. Metió un dedo en mi, se me escapó un gemido, a ese dedo siguió otro y el gemido fue mayor, su otra mano acariciaba mi clítoris sin parar, quería que lo lamiese, pero no, él no estaba allí para hacerlo, así que sus manos en las mias me poseían.

De pronto trajo juguetitos, mmm muy hábil él, sabía que me encantaban, metió las bolas en mi y comenzó a pellizcar mi clítoris, a recorrerlo sin cesar, a jugar con él, a hacerlo suyo con cada roce, con cada paso por él, las bolas hacían su trabajo, un trabajo que envidiaba, las sacó y metió durante un rato, recorrió con ellas el clítoris y subio por mi con ellas, hasta introducirmelas en la boca, me obligó a lamerlas, a dejarlas limpias, a comerme todo lo que en ellas estaba, pero en el fondo él sabía que yo lo deseaba, que no opondría mucha resistencia.

Pero él no se conformaba con eso, quería más, más, mucho más, así que introdujo salvajemente en mi esa polla dura, grande, gruesa y rugosa que siempre estaba dispuesta, ese juguete al que yo me había hecho amiga. Ohhhhhhhhh!! ahora el gemido fue mayor, me golpeó con fuerza sin esperarlo, comenzando a entrar y salir salvajemente. Mi espalda se arqueaba, hacía todo lo que podía porque él entrara más y más en mi, sin cesar, sin descanso y así lo hacía.

Mientras su mano me acariciaba, presionaba mis pechos, recorría mi clítoris, iba a hacerme sentir un orgasmo intenso, un orgasmo que se acercaba cada vez más, mi cuerpo lo anunciaba, mi excitación era mayor, mis muslos estaban húmedos, la espalda cada vez más arqueada, la polla golpeándome sin piedad, era salvaje, pero me encantaba.

Su mano se movía con movimientos que no puedo ni describir, yo ya no era consciente de los detalles, sino del todo que me venía, de todo ese cúmulo de sensaciones que me recorrían y que de pronto me obligaron a apresarlo entre mis piernas, mi cuerpo sentía unos espasmos intensos, mi coño palpitaba sin parar, la polla estaba quieta dentro y yo, y yo... yo ya no podía más, me derrumbe mientras la intensidad mermaba, mientras todo se relajaba a su paso, mientras sobre mis labios se dibujó una sonrisa, estaba a gusto, estaba liberada, ese deseo llegó a su fin haciéndome sentir disfrutada, gozada...

Enigmática

2 comentarios:

Pablete dijo...

Me encanta imaginar como palpita tu coño.... y más sentir las palpitaciones en mi polla....

Las palpitaciones de tu coño y de mi polla al unísono....sublime corrida de los dos.....

Mil besos humedos donde más te guste, preciosa....

Enigmática dijo...

Tengo mucha facilidad para que lo haga, de hecho quizá lo esté haciendo en este momento...

Sería sublime sin duda.

Ya veo que te picaste XD

Mil besos para ti también,

Enigmática

Citas

  • Cuando te pongas a escribir, cuenta la verdad que une dos instantes y observa a dónde te lleva. David Mamet
  • Aquel que encuentra la paz en su hogar, ya sea rey o aldeano, es de todos los seres humanos el más feliz. Goethe
  • Hay que ser prudentes como las serpientes, y simples, muy simples, como las palomas. Paulo Coelho
  • Queremos a quien no debemos y a quien nos quiere no lo vemos. Enigmática
  • Las palabras son lágrimas que fueron escritas. Las lágrimas son palabras que necesitan salir a borbotones. Sin ellas, la alegría no tiene brillo. Paulo Coelho
  • No hay disfraz que pueda largo tiempo ocultar el amor donde lo hay, ni fingirlo donde no lo hay. Duque de La Rochefoucauld
  • El que no sabe lo que busca no entiende lo que encuentra. Anónimo
  • Ama lo que tienes, lo que eres y lo que haces. Anónimo
  • La felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos. Anónimo
  • Ante el defecto de pedir, está la virtud de no dar. Anónimo
  • Importa mucho más lo que tú piensas de ti mismo que lo que los otros opinen de ti. Lucio Anneo Séneca
  • Una persona sin información es una persona sin opinión. Enigmática
  • La indiferencia es más poderosa que cualquier palabra. Enigmática
  • Los bancos te dan un paraguas cuando hace sol y te lo quitan cuando comienza a llover. Anónimo
  • El secreto de la felicidad es aceptar la no felicidad. Osho
  • La mayoría de las personas son como alfileres: sus cabezas no son lo más importante. Jonathan Swift
  • Hay que esperar lo mejor y pensar en lo peor. Enigmática
  • Mi físico es el envase que me representa frente a los demás, yo en realidad soy lo que hay dentro de él. Soy el contenido, no el continente. Enigmática
  • No hay palabras mal dichas, sino mal interpretadas. Anónimo
  • Mejor pedir perdón que pedir permiso. Anónimo
  • Aprendí que no se puede dar marcha atrás. Que la esencia de la vida es ir hacia adelante. La vida es en realidad una calle de único sentido. Agatha Christie
  • La posibilidad de realizar un sueño es lo que hace que la vida sea interesante. Paulo Coelho
  • Los viejos todo lo creen, los adultos todo lo sospechan, mientras que los jóvenes todo lo saben. Oscar Wilde
  • Nunca hagas apuestas; si sabes que has de ganar al otro, eres un tramposo. Y si no lo sabes, eres un tonto. Confucio
  • Lo que puedes hacer, o has soñado que podrías hacer, debes comenzarlo. La osadía lleva en sí: genio, poder y magia. Johann Wolfgang Von Goethe
  • Envejecer es como escalar una gran montaña: mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena. Ingmar Bergman
  • Las penas son las semillas de las alegrías. Anónimo
  • El presente ayer fue mañana. Anónimo
  • La justicia la da el tiempo. Anónimo
  • La mente es como un paracaídas: trabaja mucho mejor cuando está abierta. Anónimo
  • Ellos se rien de mi por ser diferente, yo me rio de ellos por ser todos iguales. Anónimo
  • La experiencia sólo es útil cuando sirve para mirar hacia adelante. Anónimo
  • Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo. Albert Einstein
  • El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona. Aristóteles
  • El adulador es el que nos dice cara a cara lo que no diría a nuestras espaldas. Anónimo
  • No perdamos nada de nuestro tiempo; quizá los hubo más bellos, pero este es el nuestro. Jean Paul Sartre
  • Ningún hombre digno pedirá que se le agradezca aquello que nada le cuesta. Terencio
  • La verdadera amistad llega cuando el silencio entre dos parece ameno. Erasmo de Rotterdam
  • Demasiado poco valor es cobardía y demasiado valor es temeridad. Aristóteles
  • Los amores son como los niños recién nacidos, hasta que no lloran no se sabe si viven. Jacinto Benavente
  • Para preservar un amigo 3 cosas son necesarias: honrarlo cuando esté presente, valorarlo cuando esté ausente, y asistirlo cuando lo necesite. Proverbio Italiano
  • La paciencia y el tiempo hacen más que la fuerza y la violencia. Jean de la Fontaine
  • El tiempo es muy lento para los que esperan, muy rápido para los que tienen miedo, muy largo para los que se lamentan, muy corto para los que festejan. Pero, para los que aman, el tiempo es eternidad. William Shakespeare
  • Hice un acuerdo de coexistencia pacífica con el tiempo: ni él me persigue, ni yo huyo de él, un día nos encontraremos. Mario Lago
  • Ámame cuando menos lo merezca, ya que es cuando más lo necesito. Proverbio chino
  • La vida sólo puede ser comprendida mirando para atrás; más sólo puede ser vivida mirando para adelante. Soren Kierkegaard
  • La felicidad es la certeza de no sentirse perdido. Jorge Bucay
  • No menos que el saber me place el dudar. Dante Alighieri
  • Siempre hay un poco de locura en el amor, pero siempre hay un poco de razón en la locura. Friedrich Nietzsche
  • Estudia las frases que parecen ciertas y ponlas en duda. David Riesman
  • Baja para subir. Enigmática
  • Para saber hablar es preciso saber escuchar. Plutarco
  • La verdad es la única herramienta con que cuentas para que las personas te conozcas como realmente eres, si no la usas no eres nadie. César Quijada
  • Si no tienes nada bueno que decir, mejor no digas nada. Enigmática
  • Que lo mejor de tu pasado sea lo peor de tu futuro. Err..Manue
  • La mayor cobardía del ser humano es alimentar el amor de otro sin tener intención de amarlo. Anónimo
  • Para atrás ni para coger impulso... Enigmática
  • Deja que mi amor te rodee como la luz del sol, y que, aún así, te de libertad iluminada. Rabindranath Tagore
  • Muchas veces lo que se calla hace más impresión que lo que se dice. Píndaro
  • Cuando un hombre se echa atrás, retrocede de verdad. Una mujer sólo retrocede para coger carrerilla. Zsa Zsa Gabor
  • Todos los hombres estamos hechos del mismo barro, pero no del mismo molde. Proverbio mejicano.
  • Los deseos de nuestra vida forman una cadena cuyos eslabones son las esperanzas. Séneca
  • Cuando alguien te lame las suelas de los zapatos, colócale el pie encima antes de que comience a morderte. Paul Ambroise V.
  • Procurando lo mejor estropeamos a menudo lo que está bien. William Shakespeare
  • No se nos otorgará la libertad externa más que en la medida exacta en que hayamos sabido, en un momento determinado, desarrollar nuestra libertad interna. Mahatma Gandhi
  • El mayor obstáculo para el amor es el temor secreto de no ser dignos de ser amados. Juan Pablo Valdés
  • La vida es un bello amanecer que acaba en un triste atardecer, hay que saber disfrutar del día cuando el sol está en lo más alto. Enigmática
  • Lo que hace disfrutable una relación son los intereses comunes, lo que la hace interesante son las pequeñas diferencias. Todd Ruthman
  • Cuando no se ama demasiado no se ama lo suficiente. Blaise Pascal
  • La verdadera ciencia enseña, por encima de todo, a dudar y a ser ignorante. Miguel de Unamuno
  • A fuerza de hablar de amor, uno llega a enamorarse. Blaise Pascal
  • El que sabe corresponder a un favor recibido es un amigo que no tiene precio. Sófocles
  • La lectura es al espíritu lo que la gimnasia al cuerpo. Richard Steele
  • La duda es la madre del descubrimiento.Ambrose Bierce
  • Sentir gratitud y no expresarla es como envolver un regalo y no darlo. William Arthur Ward
  • Una sonrisa cuesta poco y produce mucho. Charles Chaplin
  • Si tu intención es describir la verdad, hazlo con sencillez y la elegancia déjasela al sastre. Albert Einstein
  • La vida es una flor cuya miel es el amor. Victor Hugo
  • El amor no es amor si en el fondo no duele. David de María
  • El hombre libre es el que no teme ir hasta el final de su pensamiento. León Blum
  • Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas. Tagore
  • Si dices la verdad, no tendrás que acordarte de nada. Mark Twain
  • Una gran filosofía no es la que instala la verdad definitiva, es la que produce una inquietud. Charles Péguy
  • Es triste mirar al mar en una noche sin luna pero más triste es amar sin esperanza alguna. J. Efrain Suazo
  • No me da miedo morir, sino dejar de vivir. Enigmática
  • Es mejor ser rey de tus silencios que esclavo de tus palabras. William Shakespeare
  • El sexo es como respirar, natural e imprescindible. Enigmática
  • Los placeres deben colocarse en la vida lo mismo que las comas en una frase. Eugénie De Guérin
  • El sexo forma parte de la naturaleza, y yo me llevo de maravilla con ella. Marilyn Monroe
  • Todos ven lo que tú aparentas; pocos advierten lo que eres. Niccoló Machiavelli
  • Cuanto mayor es la isla del conocimiento, más largo es el litoral del asombro y la curiosidad. Ralph W. Sockman